La epífora ocular hace referencia al lagrimeo constante y excesivo de los ojos. ¿Te ha pasado?
Qué es la epífora ocular
Cuando los ojos lloran de manera constante y excesiva se produce lo que llamamos como epífora ocular. ¿Sabes por qué ocurre? Se debe a dos factores fundamentales:
- Exceso de producción de lágrimas.
- Anomalía en el drenaje de la lágrima
Así, el lagrimeo constante y excesivo se debe a un desequilibrio entre la producción y la eliminación de la lágrima.
Principales causas del lagrimeo de ojos
¿Qué provoca que tus ojos fabriquen lágrimas de manera excesiva? Te explicamos las principales causas por las que esto ocurre:
- Causas relacionadas con el exceso de producción de lágrima: desde la irritación ocular, hasta la sequedad ocular -propia de pacientes con ojo seco, infecciones como conjuntivitis, blefaritis o queratitis, alergias, traumatismos, alteraciones de la glándula lagrimal, problemas de visión sin diagnosticar, o mal corregidos -como la miopía, la hipermetropía o el astigmatismo.
- Causas relacionadas con las dificultades en el drenaje de la lágrima: obstrucciones -del punto lagrimal, primarias, secundarias o congénitas-, posiciones incorrectas de las fosas nasales -por ejemplo, por la desviación del tabique nasal-, defectos de alineamiento, o fallos en un mecanismo del sistema de drenaje.
Ante todo, recuerda que si notas cambios en tu visión, lo mejor es que acudas a tu óptica más cercana. Allí podrán revisar tu visión e indicarte a qué se debe tu lagrimeo ocular y remitirte al oftalmólogo.