La sensación de tener el ojo seco puede llegar a ser muy molesta. Determinadas personas la sufren de manera recurrente y padecen sequedad ocular. ¡Te contamos qué hacer si te sucede!
El ojo seco: características y cómo evitarlo
Existen diferentes causas que pueden provocar el ojo seco, desde aspectos ambientales, hasta ciertos medicamentos, el paso de los años, o problemas hormonales. Sin embargo, el motivo principal por el que se produce el ojo seco es el siguiente: el ojo fabrica menos lágrimas de las necesarias.
Principales síntomas del ojo seco
El ojo seco viene acompañado de una serie de síntomas en los ojos. ¡Enumeramos los principales!
- Picor y escozor ocular
- Escozor.
- Sensación de arena
- Enrojecimiento.
- Dificultad para abrir los ojos por las mañanas.
Consejos para evitar el ojo seco
Si quieres olvidarte esta molesta afección, te dejamos algunas recomendaciones que podrán ayudarte a mejorar la sintomatología de la sequedad ocular. ¡Toma nota!
- Parpadea más: al parpadear el ojo se limpia e hidrata. ¡Justo lo que necesitas si tienes el ojo seco!
- Descansa la visión: cuando utilizas pantallas de dispositivos como el ordenador o el móvil, parpadeas menos. Por ello es fundamental que prestes atención y realices descansos siguiendo la regla del 20-20-20.
- Emplea lágrimas artificiales: si tu problema está causado por un déficit en la producción de lágrimas, puedes hidratar tus ojos con lágrimas artificiales.
- Evita calefacciones o aires acondicionados fuertes: las molestias del ojo seco pueden estar provocadas por una baja humedad ambiental, por la contaminación o por vivir en un ambiente muy seco.
Además, debes recordar que ante cualquier cambio en tu visión lo mejor es acudir a realizar una revisión visual. Con ella, tu óptico-optometrista podrá recomendarte lo más adecuado.