Por qué es importante tener una buena visión al conducir
Al volante es clave tener todos los sentidos funcionando, pero el papel de la visión tal vez sea el más relevante de todos ellos. Y es que, tal y como dice la asociación Visión y Vida: ¡en la carretera tu visión es tu vida y la de los tuyos! Por ello, igual que revisas el coche antes de realizar un viaje, es imprescindible que prestes atención a tu higiene visual y a consejos para cuidarla y que revises tu visión, asegurándote de que está lista para funcionar correctamente.
Tres motivos por los que es fundamental revistar la visión para conducir
- Para aumentar el tiempo de reacción: al conducir se toman, de media, unas 15 decisiones por cada kilómetro recorrido. ¿Te imaginas lo que puede suponer perder tiempo en descifrar alguna información visual debido a un problema visual? ¡Las consecuencias pueden ser muy graves! Para conducir de forma segura la visión ha de ser buena, se deben visualizar a tiempo y con nitidez las señales de tráfico, los peatones y otros vehículos. Para evitarlo, es fundamental prestar atención a nuestra salud visual.
- Para percibir correctamente las distancias: para conducir correctamente también es importante tener una buena visión binocular. Esta integra en una sola imagen lo percibido por ambos ojos y es vital para la percepción de las distancias, la profundidad y la sensibilidad al contraste, especialmente por la noche[Problemas de visión al conducir de noche] o en días de lluvia y niebla.
- Para reducir la siniestralidad en la carretera: los problemas de visión y conducción pueden afectar no solo a factores antes mencionados como la agudeza visual o la percepción de los colores, también pueden relacionarse con otros como el aumento de los deslumbramientos, provocados por algunas patologías oculares.
- Para distinguir los colores de las señales: tener una mala percepción cromática y no ser conscientes de ello puede hacernos pasar una muy mala jugada en la carretera. ¡Es importante distinguir bien los colores que muestran las señales de tráfico!
En definitiva, los problemas de visión se relacionan directamente con un aumento en la siniestralidad al volante. Si la visión del conductor no es correcta, ¡puede convertirse en un peligro para él mismo y para los demás!