Las lágrimas artificiales son unas gotas que se utilizan para ayudar a mantener la humedad del ojo y para la lubricación de este. Se pueden adquirir sin receta médica y se utilizan para diversas causas como la sequedad ocular por espacios con humo o afecciones, entre otras.
Las lágrimas artificiales son unas gotas que se utilizan para ayudar a mantener la humedad del ojo y para la lubricación de este. Se pueden adquirir sin receta médica y se utilizan para diversas causas como la sequedad ocular por espacios con humo, calefacciones o aires acondicionados o afecciones, entre otras.
¿Qué función tienen las lágrimas artificiales?
Sirven para lubricar el ojo ante situaciones de sequedad en el ojo y ayudan a que la córnea esté bien humectada.
Actualmente, la mayoría de ellas contienen ácido hialurónico, una sustancia que está muy presente en nuestros ojos. Además, preservan el lagrimal y son utilizadas en cirugías oftalmológicas. Amplía información sobre los usos de las lágrimas artificiales en este post y, ¡no te pierdas cómo usar las lágrimas artificiales en este otro!
¿Qué tipos de lágrimas artificiales hay?
- Lágrimas artificiales con conservantes: Son las que vienen en frascos con varias dosis y contienen sustancias químicas que impiden que las bacterias crezcan una vez hemos abierto el bote.
- Lágrimas artificiales sin conservantes: Se presentan en un formato monodosis, para un solo uso y, por tanto, no necesitan añadir conservantes. Están indicadas para personas con sensibilidad a algún componente de las anteriores.
Además de los dos tipos mencionados existen también en forma de gel, pero pueden causar una visión borrosa durante un corto periodo de tiempo debido a su mayor viscosidad. ¡Lo mejor es que te dejes aconsejar por tu óptico-optometrista! Te recomendará las mejores para tu caso. Encuentra en este enlace tu óptica más cercana para dar con las lágrimas artificiales que más te convengan.