La visión del menor durante el confinamiento
El estudio realizado por Visión y Vida en julio de 2020 “Cómo ha afectado el confinamiento a nuestra salud visual” quiso preguntar a las familias, entre otras muchas cosas, cómo han vivido los más pequeños esta etapa, teniendo en cuenta información previa que nos confirma que el uso intensivo de pantallas a edades muy tempranas puede afectar directamente al estado de la visión del menor, desarrollando problemas de gran envergadura.
Aquellas personas con menores a su cargo respondieron a la pregunta de si sus hijos habían utilizado más tiempo las pantallas de lo que era habitual, resultando que prácticamente la mitad de ellos sí incrementaron el tiempo ante pantallas (48,2%) y la otra mitad no lo hizo (51,8%).
Por tanto, independientemente de la opinión subjetiva del incremento o no de horas ante pantallas es importante saber cuantitativamente cuánto tiempo destinaron los menores a ello.
Así, preguntados por el número de horas que los niños han estado ante pantallas, sabemos que:
- El 69,6% de la muestra estuvo más de dos horas al día ante pantallas. Hay que destacar que la Organización Mundial de la Salud indica que los menores de edad, entre 2-5 años, no deben superar la media de una hora diaria y, entre 5 a 12 años, no deben estar más de una hora y media al día usando pantallas y dispositivos digitales.
- La mitad de los menores (50,3%) estuvo entre cuatro y ocho horas ante las pantallas y dispositivos digitales.
- Dos de cada diez (22,1%) menores estuvieron ocho horas o más ante pantallas, lo que correspondería a una jornada laboral completa o más.
Con este análisis es interesante estudiar cuál es la realidad que han encontrado los profesionales ópticos-optometristas en sus establecimientos sanitarios de óptica, dado que es de suma relevancia comparar lo que el usuario cree, de manera subjetiva sobre su visión, con lo que los datos nos demuestran y ver si existe correlación.
Así, podremos saber hasta qué punto existe una conciencia sobre la necesidad de cuidar de manera preventiva la salud visual, atendiendo a esas señales que el sistema nos emite y siendo proactivos en la búsqueda de soluciones para los síntomas detectados.
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