Fumar es tan malo para tus ojos como para el resto de tu cuerpo. Si fumas, puedes tener problemas graves en los ojos que podrían causarte pérdida de la visión o ceguera.
El tabaco representa un factor de riesgo importante para enfermedades en la retina, como la degeneración macular asociada a la edad (DMAE).
Las sustancias nocivas del tabaco aceleran el envejecimiento de la retina provocando el deterioro de la vista. En el caso de la degeneración macular asociada a la edad, afecta a la mácula, la zona central de la retina, y produce una pérdida de visión central, la cual se vuelve borrosa y distorsionada. La degeneración macular es una enfermedad de los ojos que afecta especialmente la visión central. Necesitas la visión central para ver los objetos claramente y para realizar tareas comunes como leer, reconocer los rostros y conducir.
Quien la padece tendrá problemas para enfocar los objetos y diferenciar los detalles más pequeños a la hora de realizar actividades cotidianas.
Dos de las mayores amenazas para tu visión que provoca el tabaco:
- La degeneración macular
- Las cataratas
Podemos pensar que nuestros ojos están bien, pero la única forma de saberlo con seguridad es haciéndonos un examen completo de los ojos. La degeneración macular asociada a la edad, por lo general, no presenta síntomas a priori, por lo que un examen completo es la mejor forma de detectar esta enfermedad en etapas tempranas.
La mejor forma de proteger tu visión de los daños asociados al tabaquismo es dejar de fumar o nunca empezar a hacerlo.
Si crees necesitar una revisión en tus ojos, no dudes en ponerte en contacto con un especialista.
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