¿Has escuchado hablar alguna vez de la lateralidad? Es la preferencia que muestran la mayoría de las personas por un lado de su propio cuerpo. En la Wikivisión os contamos cómo afecta a la visión.
¿Has escuchado hablar alguna vez de la lateralidad? Es la preferencia que muestran la mayoría de las personas por un lado de su propio cuerpo. ¡Atención al post para descubrir cómo afecta a la visión!
¿Qué es la lateralidad?
La lateralidad es una función compleja que se deriva de la organización binaria de nuestro sistema nervioso. Según cómo se distribuyan las funciones corporales en nuestro cerebro, utilizamos preferentemente un lado u otro de nuestro cuerpo.
El cerebro dispone de dos estructuras hemisféricas especializadas, que son las responsables de controlar todo el complejo sistema dual, integrando la información sensorial, orientándonos en el espacio tiempo y en el mundo que nos rodea. Es lo que generalmente conocemos como ser diestro o zurdo.
En general, se ha asociado el hemisferio izquierdo con la zona que realiza el procesamiento verbal, lógico y secuencial. Y por su parte, el hemisferio derecho está más relacionado con lo intuitivo, lo global o lo creativo, etc.
Por ello, los expertos hablan de lateralidad homogénea cuando mano, pie, ojo y oído ofrecen una dominancia en el mismo lado, ya sea en el lado derecho (diestro) o izquierdo (zurdo). Cuando esto no ocurre, estamos ante la lateralidad cruzada.
¿Qué es la lateralidad cruzada?
Sucede cuando existe una lateralidad distinta de la manual para pies, ojos u oídos (por ejemplo, mano derecha dominante con dominio del ojo izquierdo). La lateralidad cruzada mano-ojo, ha sido una de las más estudiadas y con frecuencia es sinónimo de problemas en el aprendizaje, en especial en los procesos de lectura y escritura. De hecho, hablamos de ella cuando os contamos las curiosidades del gateo, ya que los pequeños cuando comienzan a gatear ejercitan el enfoque visual y desarrollan su coordinación mano-ojo.
Diferencia entre la dominancia motora y sensorial y cómo afecta a la visión
Y al igual que existe en nuestro sistema nervioso, también existe el concepto de dominancia ocular. Esta se refiere a la superioridad de un ojo sobre el otro en tareas perceptuales o motoras. ¿Sabrías decirnos cuál es tu dominancia?
Para aclarar un poco estos conceptos, haz una prueba, intenta apuntar a un objeto como si estuvieras jugando a la diana y quisieras lanzar un dardo. ¿Cierras un ojo? ¿Qué ojo cierras? ¡Ese es tu ojo dominante!
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